El gasto que conlleva la violencia de género
El gasto público para enfrentar la violencia contra las mujeres en República Dominicana está atrapado en un patrón en el que el Estado invierte cuatro veces más en responder a las emergencias que en la prevención.
Un análisis de la ejecución financiera del Ministerio de la Mujer, entre enero y septiembre de 2023, 2024 y 2025, revela que, por cada peso invertido en la atención de víctimas, se asignaron 25 centavos a la prevención.
En esos períodos, la institución ejecutó RD$ 982.9 millones, de los cuales RD$ 785.9 millones se concentraron en servicios de atención a víctimas, mientras RD$ 197.1 millones se destinaron a programas preventivos como capacitación y sensibilización en igualdad y equidad de género, asistencia técnica para incorporar la perspectiva de género, para la transversalización del enfoque de género, acuerdos y convenios interinstitucionales para incrementar el nivel de autonomía de la mujeres, entre otros.
La revisión por trienio de cada año confirma que el patrón se ha mantenido en cuanto a la línea de atención a las víctimas. En 2023 costó RD$ 244.3 millones, cifra que subió a RD$ 273.2 millones en 2024 y descendió levemente a RD$ 268.2 millones en 2025.
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En contraste, la inversión en prevención rondó el 25 % ubicándose en RD$ 63.1 millones en 2023, mostrando un aumento de RD$ 73.5 millones en 2024 y un descenso a RD$ 60.4 millones en 2025, evidenciando que las demandas en los servicios de emergencia fueron el mayor peso del sistema por encima de la intervención temprana.
La magnitud del problema
Según el economista Nelson Suárez, esta disparidad entre reparar vs. prevenir evidencia que “Las políticas públicas y los recursos presupuestarios destinados para enfrentar esta epidemia no se corresponden con las colosales dimensiones del problema”, en un contexto donde los feminicidios, las rupturas de hogares y los cientos de niños huérfanos muestran el costo social creciente de la violencia.
Sostuvo que la mayor parte del presupuesto sigue enfocada en atender la emergencia, mientras la prevención continúa relegada y sin peso real dentro del Presupuesto General del Estado. En ello, indicó que el Programa de Reducción Integral de la Violencia de Género e Intrafamiliar representó apenas el 0.064 % del gasto nacional en 2025 y el 0.076 % proyectado para 2026.
“No es lo primero”
Por su parte, la presidenta del Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas, Soraya Lara, entiende que la atención a las víctimas continúa siendo indispensable, debido al nivel de riesgo y vulnerabilidad en que se encuentran muchas mujeres.
Sin embargo, insistió en que este esfuerzo, por sí solo nunca será suficiente mientras el país no invierta con la misma fuerza en desmontar las creencias y narrativas que sostienen la violencia.
- “No vivimos en un país donde la prevención es lo primero”, afirmó al destacar que la erradicación de la violencia exige políticas multisectoriales que involucren a los Ministerios de Educación, Salud, Interior y Policía, Trabajo, el Congreso y el sector privado.
En su visión, la prevención comienza por identificar y desmontar las creencias que sustentan la conducta del agresor e implica acompañar la recuperación emocional de las mujeres y concientizarlas sobre que la violencia no puede normalizarse ni justificarse.
Recordó que la violencia afecta a mujeres de todas las clases sociales y niveles educativos, y que la victimización también se sostiene por miedos reales, como perder el empleo al acudir a denunciar. Por eso, dijo, la respuesta debe ser sostenida y acompañada de campañas permanentes, psicoeducación y apoyo institucional.
Las autoridades ofrecieron en los últimos días dos balances distintos sobre los feminicidios registrados en República Dominicana durante 2025. Aunque los números no coinciden por tratarse de bases de datos con metodologías diferentes, ambos reportes apuntan hacia una reducción respecto al año pasado.
El lunes, durante la reunión de la Fuerza de Tarea de Seguridad, la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, presentó el mapa de calor delictivo actualizado. Informó que a la fecha se contabilizan 49 feminicidios, frente a los 71 del mismo periodo de 2024.
Esa cifra proviene del registro operativo de la Policía Nacional y recoge muertes violentas de mujeres que podrían estar vinculadas a violencia machista, aunque varios expedientes siguen en investigación.El viernes de la semana anterior, la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, ofreció un balance diferente apoyado en la base del Observatorio del Ministerio de la Mujer.
Según ese corte, 53 mujeres han sido asesinadas en lo que va de año, diez menos que las 63 registradas en igual fecha de 2024. Esa base incluye solo los casos ya clasificados como feminicidios tras la verificación del vínculo entre víctima y agresor, el móvil y la tipología. Es un registro más depurado, pero con tiempos de confirmación más largos.
