San Cristóbal es una ciudad de gran congestión vial, ruidosa, contaminante, con un parque vehicular de 189,170 unidades que transitan por sus estrechas calles y avenidas, que afectan la calidad de vida de los habitantes.

Es una de las seis provincias con mayor cantidad de vehículos, representando el 6.2 % de todo el parque vehicular de la República Dominicana, de acuerdo con estadísticas publicadas por la Dirección General de Impuestos Internos. (DGII).

“La Cuna de la Constitución” es también un municipio cabecero donde se violan constantemente disposiciones contenidas en la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial al parquearse en lugares prohibidos, de manera paralela, al ocupar aceras y otros males.

Avenidas como la Libertad está colmada en sus aceras de freidurías, talleres y otros negocios que ocupan parte de las aceras y el carril derecho. Camiones de los que extraen materiales de los ríos, retropalas y otros utilizan la vía como parqueos.

Aunque hay una gran cantidad de motocicletas, las dedicadas al motoconcho están ubicadas, en su mayoría en espacios señalizados, sin embargos, las de uso particular muchas son colocadas en las aceras obligando a los peatones usar la calle para caminar en algunos tramos.

Ciudadanos como el comunitario Armando Pérez, dice que la situación se ha agravado tanto que los vehículos ya prácticamente no caben en la ciudad de San Cristóbal. “Se complica con la poca actividad de las autoridades que tienen que manejar eso. Por ejemplo, Tránsito Urbano del Ayuntamiento”.

Entiende que hay que regular el parqueo de los establecimientos comerciales, clínicas, bancos que no tienen suficientes parqueos para sus empleados y clientes y se utilizan las calles para parquearse, lo que limita la circulación en las principales vías como La Libertad y la Constitución, Santomé, General Leger y Borbón, entre otras.

Deploró que en la avenida Libertad haya una ferretería que utiliza la acera de los peatones como depósitos de sus mercancías, como arena, cascajo, blocks y otros materiales.

Dijo no entender como las autoridades permiten que cualquier propietario de negocio coloque conos en frente de sus establecimientos y reserve parqueos si las calles son para transitar y parquearse en los lugares permitidos de manera organizada.

La Digesett

Ante esa realidad el coronel, Alejandro Cabrera Manzueta, de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) regional San Cristóbal, asegura que la situación está mejorando luego que la entidad iniciara, junto a la Alcaldía, un proyecto que incluye la reposición de los semáforos, muchos de los cuales estaban apagados.

Explicó que cuentan con más de 10 agentes en puntos neurálgico que agilizan el tránsito y, como fruto de ese trabajo, con frecuencia retienen vehículos de cuatro ruedas y motocicletas que circulan por las calles de la ciudad sin las documentaciones requeridas por la Ley 63-17.

“Ya hemos ganado más de un 90 % con relación a los semáforos que anteriormente estaban dañados, pero ya gracias al señor presidente de la República y a las autoridades competentes, están cinco cinco arreglados”, indicó.

Los motoristas son los que más violan la Ley y, cuando esos vehículos son fiscalizados, sus propietarios tienen que ponerse al día con los requerimientos y hasta que no cumplen con los requisitos como casco, seguro al día, actos de venta y licencia no son devueltos.